No sabes lo que es la vida hasta que no te han clavado una daga ardiendo en el centro del corazón y ha estallado, manchándolo todo de sangre. No sabes lo que es la vida, hasta que no te has emborrachado para curar las heridas, sabiendo que no las vas a cicatrizar. No sabes lo que es la vida, hasta que has encontrado los ideales por los que luchar y partirte la cara hasta sangrar. Pero nunca sabrás lo que es la vida, si no luchas por reconstruir(te), si no peleas por encontrar a quien te ayude hacerlo, ¿y quién mejor que tú mismo?
dissabte, 17 de setembre del 2011
Cadena perpetuísima.
Tú, la niña de mis ojos. La que nunca me ha abandonado pasase lo que pasase. Tú, la princesa de mis sueños. La que siempre me ha dado los abrazos más largos y con más sentimiento que se pueden regalar. Tú, la hermana perfecta. La que no le importa cogerte el móvil a las tres de la mañana, para cantarle una canción. Tú, la niña más bonita, esa de la que nunca he dudado, a la que siempre he querido, y no he dejado de prometerle la luna, sabiendo que lo más parecido que podía darle era un queso. Tú, mi pequeña favorita, con la que inventaba historias infinitas, de fantasías incontables. Nuestro propio lazo celeste, ¿recuerdas? Un lazo de verdad, de los que nuestros amigos frikis los celestes nos dijeron que no se iba a romperse, y ahora... Está degradándose. Tal vez sea yo quien lo esté rasgando, o tal vez seas tú, ¿quién sabe? Igual llega un día en el que se rompe definitivamente, y los frikis nos hayan mentido pero, hasta que llegue ese día, hasta que la muerte me hunda a dos metros bajo el suelo, recuerda únicamente esto: Todavía no existe la palabra para describir lo que siento por ti, la canción que cuente nuestra historia. Te quiero, por encima de todo, acuérdate siempre, ma petite soeur.
Subscriure's a:
Comentaris del missatge (Atom)
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada